miércoles, 4 de enero de 2012

En el punto de mira

Muy a mi pesar, inauguro una nueva etiqueta para el blog, parental control. Hoy, mi madre se ha cansado de que nunca quiera cenar al volver a casa ni comer acompañada. Vino antes a hablar conmigo, a decir que tenía que comer bien, que sino me iba a poner enferma, que una cosa es cuidarse y otra comer como yo como, ha querido saber que he comido a lo largo de todo el día (comí normal, no he tenido que inventarme nada por suerte), y me ha hecho prometer que antes de dormir cenaría algo. Lo he hecho hace un rato, sin hambre, un poquito de sopa.
Menos mal que solo me quedan 4 días de vacaciones, cuando vuelva al piso obviamente comeré como me de la gana, pero no quiero preocuparla, así que mientras ella esté atenta..tendré que andarme con ojo y hacer algún que otro sacrificio. Buf, justo lo que me faltaba...
No puedo seguir subiendo, tampoco quiero vomitar más...no he vuelto a pesarme, pero tengo ojos en la cara, me estoy poniendo enorme...No, no puedo estar cagándola otra vez...
Mañana voy al gimnasio.

1 comentario:

  1. waaaaaaaaaaaaaaaaaaaa te entiendooooo estoy como una vaca por culpa del puto parental control :|
    Pero como bien dices pronto no estaremos en casa y vamos a poder comer lo que se nos de la gana y bueno, fuerza linda.
    Gracias por pasarte :)

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